Seamos sinceras y vayamos al grano.
Al principio queremos adelgazar para vernos bien con un una prenda o para que la gente nos elogie lo bien que nos vemos con esos kilos menos.
Es más cuando tenemos sobrepeso nos andamos quejando de que nuestra tripa está muy abultada, nuestras nalgas y piernas están invadidas por estrías o celulitis entre otras quejas.
Por ello en la mayoría de los casos, recurrimos a cuanto tratamiento o dieta de las famosas, para quitarnos esas imperfecciones.
Lo que no nos damos cuenta es que lo que vemos en el espejo, es una manera que tiene el cuerpo de expresarse por los años de dietas y efecto rebote.
Así que es hora de darle un poco de amor.
A fin de cuentas, es el único lugar donde habitamos.
¿Y qué tiene que ver una escritora de Ley de Atracción en este asunto?
En el libro La Magia de Rhonda Byrne hay un ejercicio poderoso que nos ayudará a reconectar con nuestro cuerpo.El ejercicio consiste en reservar unos minutos para observarnos en el espejo a cuerpo completo con ropa o sin ropa.
Al mirarnos, debemos evitar juzgarnos y sentir vergüenza.
Y empezamos a agradecer a cada parte del cuerpo por todo lo que podemos hacer gracias a ellos.
Por ejemplo:
Si empezamos por los ojos, podríamos decir:
✔ Gracias ojos por permitirme apreciar bellos paisajes.
✔ Gracias por permitirme ver a mis seres queridos.
✔ Gracias por permitirme ver mi película favorita, etc.
Ahora es tu turno: ¿qué agradecerías a cada parte de tu cuerpo?
Paso 1: Tu cabeza.
Paso 2: Tus brazos.
Paso 3: Tus manos.
Paso 4: Tu tronco.
Paso 5: Tus piernas.
Paso 6: Tus pies.
Paso 7: Tus órganos internos.
Paso 8: Tus sentidos.
Por último, mírate a los ojos y afirma:
“Me amo tal como soy, mi cuerpo es un instrumento que me permite disfrutar la vida”.
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